La verdadera abundancia material

La verdadera abundancia material es la que está en el centro, es decir la que está en tu corazón y que depende de tu Presencia Divina y no de ningún recurso externo.

La firmeza de la abundancia, reside en la fuente suprema de toda riqueza, las fuentes externas nunca serán una fuente segura de abundancia, por su misma condición siempre cambiante del mundo.

Tu tienes siempre la oportunidad de decidir a que fuente adherirte, bien sea a tu Presencia Divina o a cualquiera externa.

De todos modos creo que ya sabes lo que es adherirse a las condiciones del mundo, y aquí vamos a hablar de la abundancia material firme y verdadera.

A pesar de que aun no tengas abundancia material o que la hayas tenido y ya no la tengas; siempre puedes cambiar esa situación hacia una abundancia real.

¿Por qué siempre puedes cambiar hacia una abundancia material real?

Porque tengas consciencia o no de ello, siempre tienes una relación de receptividad con tu Divina Presencia y por lo tanto posees la fuerza interior para establecer real abundancia material y deshacerte de todo aquello que no te permite expresar la abundancia material en tu vida.

Las personas que están pasando por situaciones de carencia económica o que tienen falta de abundancia material, se la pasan con la disyuntiva de si sacrificar algunos valores para conseguir la abundancia material.

Por ejemplo, toman en consideración el soportar tratamientos injustos por un sueldo, o meterse en más complicaciones (como prestamos), porque existe la duda de que la situación no se resolverá nunca; o simplemente el hacer algo que pueda comprometer su dignidad, con la creencia de que con ello va a conseguir la abundancia material.

Todas esas actitudes o pensamientos son cosas corrosivas del mundo, son peligrosas y nunca te van a proporcionar abundancia material; están basadas en la autocompasión, la desesperanza, la duda, la impaciencia y el miedo.

Todas esas cosas pueden ser apartadas, pues tu naturaleza es fuerte y es esencia divina; de modo que tales influencias son superables.

De ti depende de que te dejes seducir por el mundo o no, es importante decidir; por lo tanto decide a que fuente adherirte.

Tu mereces la abundancia material real; adherirte a la fuente suprema de toda vida es recibir bendiciones constantes y firmes para ti y para otros.

Muchas Bendiciones

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