¿Qué es eso de querer imitar a una persona, usar sus palabras, seguir sus pasos?

La palabra imitación tiene su origen en el concepto latino imitatio y está asociada al verbo imitar. Hace referencia a la acción que se realiza intentando copiar otra o tomándola como ejemplo.
En este sentido una imitación es una cosa o un acto que se encarga de copiar a otro que generalmente está considerado como mejor o de más valor.
La imitación también consiste en realizar algo de la misma manera que lo hace otra persona, copiando su estilo.
El tema es por qué queremos hacer y ser igual que el otro? Por qué lo tomamos como modelo a imitar?
al imitar hay una previa indentificación con esa persona, un rasgo que busco copiar y esto desde ya viene de los modelos infantiles más tempranos donde ese rasgo me indica por propia experiencia que es signo de triunfo y de méritos que quiero yo también poseer o conquistar.
En psicoanálisis la identificación es un mecanismo de defensa. Gracias a este mecanismo de defensa el yo obtiene satisfacción al identificarse con un objeto, persona, grupo o institución que reúna características valoradas positivamente por el sujeto.
En la imitación usamos ese aprendizaje basado en la observación de la conducta de un modelo.
Entonces si yo imito a alguien es porque en el fondo quiero ser igual u obtener lo mismo que el otro tiene, lo tomo de modelo porque supongo que copiándolo voy a tener lo mismo.
Ahí entran a jugarse la competencia solapada, la envidia y los celos.
Recordemos que en el modelo infantil edípico, el niño quiere competir con su padre por el amor de la madre y al revés en el caso de la hija mujer y esto se repite en la adultez cuando se da ese trío y aparece la rivalidad o competencia por ganar esa posición o lugar privilegiado.
Por eso en todo vínculo de amor siempre hay una sombra de un tercero para compararse o imitar.
Inconscientemente se piensa, si ella ganó, algo tiene que yo no tengo y voy a tratar de ser igual para lograr lo mismo y ser amada y aceptada.
Detrás de toda imitación hay una admiración oculta.
Detrás de un imitador hay un gran inseguro, que no tiene herramientas propias para lograr por sí mismo alcanzar lo que quiere.
Por ende detrás de un imitador hay un plagiador de valores, de intelecto, de afecto, una baja autoestima, una inmadurez emocional y un vacío que tapar.