Desintoxica tus pensamientos y lenguaje

Porque tantas veces nos decimos a nosotros mismos que somos inútiles, aburridos o gordos? Solamente el cambiar las palabras que usamos para describir nuestras vidas puede tener un profundo cambio positivo en ellas. Tenemos la tendencia a tener expectativas bajas, especialmente por los factores que rodean nuestras vidas a consecuencia de lo que se nos han dicho, especialmente que nuestra sociedad no premia el optimismo ni el positivismo. Solo piensa en la reacción que habria si mañana anunciaras “soy un escritor fantástico” o “soy el mejor en mi trabajo y seguramente seré promovido”. Sería considerado un arrogante.

Pensamientos negativos normalmente son originados de experiencias de nuestra niñez, que ya han sido olvidadas, algunas pueden ser recordadas y también pueden ser un hábito que con un poco de disciplina se pueden empezar a cambiar.

Una vez tu estes mas conciente de lo que dices y su significado, tu puedes hacer algo al respecto. Es muy importante darse cuenta de lo que piensas y dices ya que los pensamientos y el lenguaje pueden causar efectos negativos en nuestra salud tan malos como comerse una comida llena de grasa saturada como son las papas fritas. Pensamientos y palabras que uses tienen la habilidad de hacerte sentir en un estado de depresión, se ha comprobado que problemas de peso y el tener una baja autoestima están interrelacionados. Pensamientos negativos te pueden hacer sentir como si te fueras a enfermar, y probablemente hasta te enfermes, así de poderosa es la mente, aunque estés bien físicamente, el daño de los pensamientos negativos generados en tu interior pueden afectarla drásticamente. Si gastas la mayor parte de tu tiempo teniendo pensamientos estresantes, negativos, te sentirás tenso y al mismo tiempo tu cuerpo libera hormonas toxicas de stress que llevan a tener la presión alta. Piensa en cosas buenas y rápidamente puedes cambiar lo que está pasando en tu interior. Pensamientos positivos al contario liberan serotonina, endorfinas que son hormonas reductoras del stress. Vas viendo mi lector que tener un pensamiento positivo está conectado a tu cuerpo y como el reacciona para vencer los malos pensamientos. Tener una dieta orgánica es lo ideal, puede ser costoso and quitarte tiempo pero no te cuesta nada desintoxicar tu lenguaje y los beneficios son inmediatos. La llave es aprender a que nuestras palabras reflejen nuestras metas, sueños y no nuestras preocupaciones pasadas o futuras que es donde casi todas fallamos y podrás notar que tu vida empezara a mejorar. Querido lector aquí van unos pequeños consejos para que apliques a tu lenguaje en forma que empieces a controlarlo más efectivamente y a tu favor:

• Escucha lo que dices, para y toma un momento para expresarlo de otra manera.
• Escucha palabras repetitivas o comentarios y cambia aquello negativo con palabras de suporte y positivismo.

• Nunca digas que siempre llegas tarde, que no entiendes direcciones, etc.

• Cuando llamas a alguien por teléfono no digas que eres solo tú, porque estas devaluando la importancia de tu llamada. • No te pongas sobrenombres, aunque solo sea en tu cabeza y nadie lo pueda escuchar.

• Si tu mente está colmada de pensamientos tóxicos, piensa en unas vacaciones y ten la imagen en tu mente.

• Una vez relajado, remplaza los pensamientos negativos con positivos

Si te criticas tu mismo con frases como “sabía que no podría”, “no valgo la pena” y muchas más, espera y mira que te estás causando daño al mismo tiempo que limitas tus capacidades. Cambia estos comentarios destructivos con otros que te soporten y representen lo que quieres ver en ti, como “hice todo lo posible”, “estoy orgulloso de mi esfuerzo”. Mi querido lector hay que tener perseverancia para romper con estos hábitos que nos dominan y controlan nuestras vidas, para así liberarnos del stress y la ansiedad que estos producen. Una vez tu lenguaje y pensamientos reflejen lo que quieres y no tus limitaciones, podrás alcanzar tus metas y sueños.

http://alegriadevivir.wordpress.com/2010/11/15/desintoxica-tus-pensamientos-y-lenguaje/