Encontrar la paz interior

Encontrar la paz interior...

Si queremos tener una verdadera paz en el mundo, primero tenemos que encontrar dentro de nosotr@s mism@s.

La mayoría de la gente está de acuerdo en que un mundo más pacífico sería una situación ideal para todos los seres vivos. Sin embargo, a menudo al plantearles como trasladar esta situación ideal a la vida real se quedan perplejos. Si queremos la verdader paz en el Mundo, cada un@ de nosotr@s debe encontrarla en su interio primero. Si no nos gustamos a nosotr@s mism@s probablemente no le gustaremos a quienes nos rodean. Si estamos en un constante estado de conflicto interno, es más que probable que este conflicto se manifieste en el mundo. Si estamos expuestos a luchcas constantes con nuestra propia familia, con nuestr@s amig@s y conocid@s, no puede haber paz en el Mundo. Tenemos que investigar nuestra propia luz interior, nuestras luchas internas porque ahí es el único lugar donde realmente podemos crear un cambio.

Cuando iniciamos el proceso de buscar dentro de nosotr@s mism@s el significado de la paz, vamos a empezar a entender por qué siempre ha sido tan difícil de conseguir. Esto en sí mismo nos permite ser compasiv@s hacia las muchas personas en el mundo que se encuentran atrapad@s en conflictos tanto personales como universales. Podemos tener una experiencia de paz en nosotr@s mism@s que nos recordará lo que queremos crear en el exterior, pero siendo seres humanos sentimos a la par hacia la dirección opuesta la voluntad de defendernos, para mantener lo que sentimos que nos pertenece, proteger a nuestros seres queridos y nuestros ideales y no nos queda más que sentir ira cuando éstos se ven amenazados.

Este conocimiento es importante porque no podemos verdaderamente conocer la paz hasta que no entendamos las muchas tendencias y pasiones que amenazan nuestra capacidad para encontrarla, es más, la paz incluye necesariamente formas de actuar que podrían considerarse contradictorias con ella misma!.

Estar en paz con nosotr@s mism@s no se trata de negar o rechazar ninguna parte de nosotr@s en concreto por el contrario, debemos estar dispuestos y ser capaces para mantenernos en toda nuestra complejidad en un abrazo lleno que no excluya nada de lo que nos rodea o de lo que somos. Esta es quizás la parte más difícil para much@s de nosotr@s, porque tenemos la tendencia a renegar de los aspectos negativos de nuestra humanidad.
Irónicamente, sin embargo, la verdadera paz comienza con una disposición a asumir la responsabilidad de nuestra humanidad para que en última instancia pueda convertirse en la luz de nuestro amor.

Besitos