Perder el miedo al NO

ABER DECIR NO, es igual a poner algo en función: ON. Muchas veces nos cuesta decir NO aunque lo pensemos, lo sentimos y sepamos perfectamente que tenemos que decir NO, pero bobamente, decimos si…
Decir NO, da miedo a demasiadas personas. Piensan que la otra persona en frente se va a enfadar, disgustar, o peor si es nuestra pareja, dejarnos, etc…(películas mentales que nos hacemos…) pero así, no es, y dar caprichos al otro tampoco es, eso es ser un bobo flojo.

El de enfrente, al ver tu determinación, tu fuerza tranquila, se abre a otras posibilidades y pone en marcha otra posible solución y, muchas veces es mejor y al final, te acabará respetando mucho más… ¿Por qué? porque ve en ti esa fuerza, tu valentía, esa seguridad que tanto hace falta por nuestro mundo. Tampoco la idea es decir NO a todo… Solo decir >NO cuando lo sentimos es suficiente.

Aprender a decir NO, sin inmutarnos, cuando sentimos que debemos hacerlo, nos lleva a ser dueños de nuestros actos. No dejemos que nadie nos obligue a hacer, decir u obrar en contra de nuestra voluntad es : SER, salvo que existan BUENAS razones y que los argumentos opuestos sean realmente convincentes y nos hagan cambiar de opinion.

FUENTE: TAO SAI