¿En qué circunstancias te sientes agradecido? Tal vez respondas: Doy gracias por la familia, la casa bonita, los amigos y el trabajo que tengo. Lo que todo esto tiene en común es que ya está en tu vida.
Por lo general, nos sentimos agradecidos por algo que ha ocurrido o que ya está presente en nuestra vida. A ti y a mí nos han hecho creer que necesitamos una razón para ser felices, un motivo para sentirnos agradecidos, y una causa para sentir amor. Que la realidad exterior es lo que nos hace sentir distintos por dentro, es el modelo newtoniano. Pero el nuevo modelo de realidad nos reta, como creadores cuánticos, a cambiar algo en nuestro interior —en la mente y el cuerpo, en los pensamientos y sentimientos—, antes de experimentar la evidencia física con nuestros sentidos.
¿Puedes agradecer una situación deseada antes de que ocurra en tu vida y sentir las emociones elevadas que te produce? ¿Puedes imaginarte esa realidad tan plenamente que empieces a estar ahora en esa vida futura?
En términos de la creación cuántica, ¿puedes sentirte agradecido por algo que existe como una posible situación en el campo cuántico, pero que aún no ha ocurrido en tu realidad? Si es así, estás pasando de la causa y el efecto (querer que algo del exterior te produzca un cambio interior), a causar un efecto (cambiar algo de tu interior para producir un efecto en el exterior).
Cuando te encuentras en un estado de gratitud, le transmites al campo la señal de que esta situación ya ha ocurrido. La gratitud no es tan sólo un proceso mental intelectual. Debes sentir como si lo que deseas ya existiera en tu realidad en este instante. Tu cuerpo (que sólo entiende los sentimientos) debe estar convencido de estar experimentando el resultado emocional de la situación futura.
Joe Dispenza