El horrible caso de Piacenza

Este caso es uno de los mas alucinantes e interesantes casos de exorcismo, por los detalles que incurrieron en el mismo. Y es que existió una serie de alucinantes diálogos entre el exorcista y la mujer endemoniada, que fueron escrupulosamente registrados por un taquígrafo, no perdiéndose ni una sola palabra. Esta curiosa circunstancia convierte al caso en cuestión en uno de los mejores documentados de la historia de los exorcismos.

Gracias a poder haber accedido a la transcripción exacta del procedimiento y a la agenda personal del exorcista, un escritor llamado Alberto Vecchi, pudo en 1953 escribir un verdadero “Best Seller” llamado: “La obsesa de Piacenza“.

Todo comenzó en una pequeña iglesia del Convento de Santa Maria de Campania, en Piacenza, una tarde el mes de Mayo de 1920. Una dama que asistió a la misa, solicitó hablar con el párroco al finalizar esta, y le contó una serie alucinante de incidencias que le ocurrían desde ya hacia varios años,que hasta el momento no se había atrevido a contar a nadie.

En aquel caso, concurrían todas las condiciones mas oportunas para que todo fuera tomado como una verdadera “Posesion Infernal”, la dama contó al extrañado y asustado capellán que en determinadas ocasiones en su casa se ponía a bailar frenéticamente, que daba saltos increíbles por la habilidad con que los efectuaba y debido ya a su edad, y que incluso iba por debajo de las mesas y las sillas como si de un animal se tratara

La manera de expresarse de la señora, no condujeron al sacerdote a pensar que fuera una loca, y tras una serie de consultas y reuniones se le hicieron varios exorcismos que condujeron a escenas horripilantes y que obligaron a varios exorcistas a emplearse a fondo.

Cuando el demonio era invocado e inducido en nombre de Dios a que dejara el cuerpo de la dama, declaraba un nombre tétrico: “Isabó” el de las “Largas Alas y Poderosos Puños“.

También en varias ocasiones provocó indecentemente a los oficiantes aprovechando el cuerpo de la mujer a que yacieran con el, y les propuso los mas insidiosos pactos carnales y de adoración satánica.

Tras muchos esfuerzos y en varias ocasiones lograron que la mujer expulsara o vomitara espuma y una bola de su vientre, que en realidad nadie supo lo que era. Todo este asunto continuó durante muchos meses y terminó trágicamente con la paulatina muerte de todos los implicados en el caso incluso los diversos exorcistas que participaron en aquellos exorcismos.

Alguien dijo y nadie se atrevió a desmentirlo que la venganza de Isabó y de sus adlateres se había producido…….

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