7 hábitos para ser más persistente

Cuando trabajas en lograr alguna gran meta, la motivación se sufre altibajos. A veces te sentirás motivado y otras no, pero no es la motivación la que produce resultados, son tus acciones. Ser más persistente te permite seguir tomando medidas incluso cuando no te sientes preparado para hacerlo.

 

La persistencia es para muchos la llave al éxito laboral o profesional, incluso económico. No obstante, para diversos especialistas en psicología positivista, como C. R Snyder, de la Universidad de Oxford, la persistencia aumenta la probabilidad de alcanzar metas difíciles y el disfrute que una persona tiene después de conseguir algo.



 

¿Cómo ser más persistente?


 

Desarrollar la persistencia puede además mejorar otras habilidades y recursos de una persona, así como aumentar el sentido de auto eficacia de una persona, si se alcanza la meta. Por ello, para desarrollarla, es importante contar con ciertas habilidades y hábitos como:

 

1. Entrenarse en el esfuerzo. La habilidad para retrasar la gratificación permite a la persona superar impulsos inmediatos a favor de recompensas que están en el futuro y que son paralelas a las propias metas.

 

2. Feed back positivo. Ayuda a corregir un error y aumenta el sentido de la competencia y la eficacia y la motivación intrínseca.

 

3. Apoyo social. Recibir ayuda y ejemplos de logros desde la infancia motivan e impulsan a mayores metas y objetivos.

 

4. Autocontrol de emociones. Para desarrollar un sentido de compromiso en la vida, una creencia de que se puede controlar lo que pasa, y una visión del cambio como un desafío positivo.

 

5. Paciencia. Hacer a las personas más resistentes y menos tendientes a abandonar cuando se encuentran ante fracasos o contratiempos.

 

6. Ser observador. Poner atención al entorno te permitirá identificar qué habilidades requieres en determinadas oportunidades y reconocer cómo es la actuación de los demás.

 

7. Tolerancia a la frustración. Aprender a disfrutar de los logros, las crítica positiva y las emociones derivadas de los aprendizajes, permiten desarrollar mayor tolerancia.

 

Es importante considerar que el modo cómo planteas tus metas y el tipo de metas que te propones, así como otros factores, pueden ejercer una influencia muy importante a la hora de determinar si la alcanzarás o no,  y cuánto te esforzarás por lograrla; por ello, la persistencia es una de las claves.

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